Acerca de los patrones de consumo
En esta ocasión, nuestra compañera Marta Ramírez, propone el siguiente debate en relación a los patrones de consumo:
"Buenas tardes a todos, me gustaría proponer un nuevo debate para que todos podamos participar más en los foros. Al igual que mis compañeros, también tiene que ver con los efectos que el Covid-19 está teniendo sobre el mundo.
Como todos sabemos, el estado de alarma que dio comienzo el 15 de marzo, trajo consigo una oleada de demanda de productos de primera necesidad como fueron: el papel higiénico, la leche y la levadura, por ejemplo. Concretamente, el consumo de alimentos se disparó en un 17,6% durante la tercera semana de confinamiento, respecto a la misma semana del pasado año y tras crecer un 16,8% sobre la semana precedente, según comentó el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas.
Esta oleada se ha ido calmando según han ido transcurriendo las semanas, pero hay otro tipo de consumo que se ha desplomado. Es el consumo en artículos de lujo, ropa, gasolina, etc. Esto era de esperar ya que, como no podemos salir de casa, poca gente decide comprar ropa por internet, por ejemplo. Esto ha supuesto una reducción del consumismo excesivo que protagonizaba nuestras vidas hasta hace muy poco.
Ahora bien, cuando salgamos de la cuarentena, ¿creéis que habremos cambiado nuestros criterios respecto a nuestro nivel de consumo? ¿O pensáis que volveremos a la senda de consumo anterior al Covid-19? ¿Es posible que las empresas lleven a cabo campañas publicitarias que incentiven de nuevo a ese consumo masivo?
Me gustaría mucho saber vuestra opinión al respecto.
Un saludo a todos y espero que estéis llevando bien esta situación.
:)"
"Buenas tardes a todos, me gustaría proponer un nuevo debate para que todos podamos participar más en los foros. Al igual que mis compañeros, también tiene que ver con los efectos que el Covid-19 está teniendo sobre el mundo.
Como todos sabemos, el estado de alarma que dio comienzo el 15 de marzo, trajo consigo una oleada de demanda de productos de primera necesidad como fueron: el papel higiénico, la leche y la levadura, por ejemplo. Concretamente, el consumo de alimentos se disparó en un 17,6% durante la tercera semana de confinamiento, respecto a la misma semana del pasado año y tras crecer un 16,8% sobre la semana precedente, según comentó el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas.
Esta oleada se ha ido calmando según han ido transcurriendo las semanas, pero hay otro tipo de consumo que se ha desplomado. Es el consumo en artículos de lujo, ropa, gasolina, etc. Esto era de esperar ya que, como no podemos salir de casa, poca gente decide comprar ropa por internet, por ejemplo. Esto ha supuesto una reducción del consumismo excesivo que protagonizaba nuestras vidas hasta hace muy poco.
Ahora bien, cuando salgamos de la cuarentena, ¿creéis que habremos cambiado nuestros criterios respecto a nuestro nivel de consumo? ¿O pensáis que volveremos a la senda de consumo anterior al Covid-19? ¿Es posible que las empresas lleven a cabo campañas publicitarias que incentiven de nuevo a ese consumo masivo?
Me gustaría mucho saber vuestra opinión al respecto.
Un saludo a todos y espero que estéis llevando bien esta situación.
:)"
Buenas a todos,
ResponderEliminarEn primer lugar, gracias Marta por empezar este debate tan interesante. Este tema es algo que creo que muchos de nosotros nos hemos planteado en nuestras propias casas.
He estado leyendo los comentarios anteriores y estoy bastante de acuerdos con algunos de mis compañeros.
Esta situación tan excepcional solo lleva con nosotros un corto periodo de tiempo y aun así hemos podido apreciar unos cambios en el comportamiento del consumidor muy severos. Como todos pudimos apreciar, el consumidor se mueve mucho por las emociones, al principio de todo esto, vimos como el consumo de bienes primarios fueron consumidos hasta dejar a algunos comercios prácticamente sin stock.
Esta claro que el miedo a pasar hambre o a no tener productos tan básicos produce este tipo de comportamiento. Por suerte, esta situación no duró mucho, lo que nos ha llevado a otro tipo de consumismo, como habéis comentado, el patrón del consumidor ya no se basa en la restauración, moda, complementos, etc.
Una gran parte de la población esta gozando de mayor tiempo libre, lo que ha llevado a ese nuevo estilo de vida, para algunos es el deporte y la electrónica, mientras que otros optan por la cocina y el picoteo.
Respondiendo a las preguntas propuestas, en mi opinión la sociedad ha cambiado. Pero como todo, es cuestión de tiempo, pues ahora mismo, el miedo hace que seamos más precavidos y nos resguardemos, lo que tiende a un mayor ahorro. Además, muchas familias van a reducir su consumo a los bienes de primera necesidad, pues no podemos olvidar el gran numero de familias que se han quedado sin trabajo debido a esta situación.
Una compañera ha preguntado si estaríamos dispuestos a salir de España y volver a viajar, mi respuesta es que sí. Aun así, estoy segura de que muchos no piensan lo mismo, es por ello que, respondiendo a la pregunta de Pablo, creo que el sector servicios va a verse bastante afectado, incluso más que el sector industrial.
¿Por qué? El sector servicios se ha visto afectado en dos grandes bloques: hostelería y turismo. Como podemos ver, ahora mismo el turismo es prácticamente inexistente, en comparación con la situación anterior. Además, este sector depende de las decisiones de los altos mandos, ya que de momento muchas fronteras no permiten la entrada o salida de los países. Por otro lado, la hostelería ha incurrido en pérdidas muy graves, muchos pequeños comercios no han sido capaces de soportar esta situación, mientras que otros no solo han tenido que "sobrevivir” el confinamiento, sino que van a tener que adaptarse con nuevas medidas como la reducción de aforo de locales, la oferta de nuevos servicios como podría ser el servicio a domicilio, el aumento de las medidas de higiene, etc. Medidas que suponen costes que no se verán compensados en un futuro próximo
ResponderEliminarBuenos días, quiero darle las gracias a mis compañeros que han intervenido y especialmente a Marta por iniciar este debate. Son dos puntos lo que me gustaría comentar.
En primer lugar, frente a la principal pregunta sobre el cambio de los hábitos de consumos, es obvio que este ha cambiado. Debido a las restricciones provocadas por el estado de alarma y la inseguridad de la población, todos que los patrones de consumo han cambiado drásticamente. Por una parte, hay sectores que han salido reforzados de esta extraordinaria situación (alimentación, telecomunicaciones, farmacéuticas o plataformas de streaming), y, por otra parte, otros sectores que desgraciadamente están sufriendo una gran pérdida en estos días y esta será continuada en el corto plazo (turismo, venta de automóviles). Además, imagino que estos cambios vendrán para quedarse durante un tiempo prolongado postcrisis sanitaria, volviendo quizás a la situación anterior en un muy largo plazo
Un dato que se ha hecho popular en estas ultimas semanas, referente a este tema, es la caída drástica del barril de petróleo. Hace unos días, el precio de referencia de barril de crudo según WTI comenzó en torno a los US$18 y llegó a hundirse en esa misma tarde en US$-37,63. Esto significaba, en otras palabras, que los productores pagaban para que los consumidores retirasen los barriles. La principal causa de este histórico hecho viene por una gran reducción de la demanda del petróleo acompañada por el mantenimiento de la producción en torno a los valores anteriores a la crisis.
En segundo lugar, algunos de mis compañeros han mencionado el problema medioambiental que suponía los habito de consumos previos a la crisis y alternativas a este sistema de consumo. Estoy de acuerdo que el consumo no se debería limitar y que cada uno es libre de hacer sus compras de la forma que uno mismo desee. Sin embargo, creo que el Estado podría intervenir en este aspecto para incentivar a las industrias a producir de una forma más limpia sus productos o buscar alternativas a estos. En este tema, el FMI se pronunció hace poco tiempo proponiendo una tasa de 75$ por tonelada de Co2 para 2030, cuyo objetivo principal es desplazar a las tecnologías que mas emisiones generan en favor de otras, como el carbón a favor de las renovables.
El problema no es tanto consumir productos básicos o caprichos, ya que en la mayoría de los supermercados es fácil encontrar frutas y verduras naturales dentro de grandes capas de plástico y platos de corcho, sino hacer consciencia en la sociedad de toda la huella de contaminación que dejamos con nuestras acciones y así orientarla hacia nuevas formas más eco-friendly. Existen numerosas iniciativas sobre la concienciación de la sociedad como es Flifht2fart Converter, que permite conocer la huella de carbono producida por un pasajero en el desplazamiento aéreo introducido.
ResponderEliminarBuenas tardes,
En primer lugar agradecer a Marta que haya comenzado este debate.
Como han comentado mis compañeros, esta pandemia mundial está cambiando nuestros hábitos de consumo pero pienso que no de una forma demasiada drástica ya que creo que muchísimas personas que antes compraban online siguen haciéndolo, sólo hay que ver que las compañías transportistas han aumentado sus repartos aunque sí bien no todos los productos son de primera necesidad como ha podido ser la compra de mascarillas, uno de los bienes más preciados últimamente.
Además centrándome en el sector textil, ha aumentado la demanda de productos para hacer deporte en casa como pueden ser pesas o cintas de correr. Es también cierto que la mayoría de grandes superficies han puesto muchos descuentos y rebajas para así fomentar el consumo. Es por eso, además de otras razones, que opino que no ha disminuido el consumismo sino que se ha mantenido pero simplemente se ha desviado la atención hacia otro tipo de productos.
Por eso, respondiendo a la pregunta de Marta, pienso que el consumismo sigue estando latente en nuestra sociedad pero que sin embargo a partir de ahora vamos a darle más importancia a la seguridad e higiene de lo que compramos, y por eso pienso que las compras online van a ser masivas ya que las personas pueden tener miedo de ir por ejemplo a un centro comercial cuando sea posible. Y por supuesto llevarán campañas publicitarias que aumenten este consumo pero sobretodo que intenten darle al consumidor una imagen de que respetan totalmente las reglas de higiene, además de informar de las medidas adicionales que tomarán para que las personas poco a poco pierdan ese miedo que estamos adquiriendo a las aglomeraciones o grandes superficies.
Un saludo.
Buenas tardes a todos, me gustaría agradecer a nuestra compañera Marta por iniciar este debate.
ResponderEliminarTodos somos conscientes de que nuestros hábitos de consumo han cambiado mucho con esta nueva situación. Al principio, la población compraba masivamente productos básicos ante el miedo de que pudiera darse el desabastecimiento, dada la situación de emergencia sanitaria que sufría nuestro país. Durante semanas en los supermercados se observaban estantes vacíos, sobre todos en los alimentos más fundamentales como son la leche, la carne, el papel higiénico... Más tarde, ese "caos” inicial, provocado por la situación de incertidumbre que estábamos viviendo, fue poco a poco desapareciendo. La población paso a comprar menos productos básicos y más productos "capricho” como pueden ser la cerveza, el chocolate, las golosinas, productos de repostería...
Al ver esta evolución nos damos cuenta de que nuestros hábitos de compra tienen mucho que ver con nuestra situación emocional, al principio ante una situación de incertidumbre y miedo, reaccionamos comprando grandes cantidades de alimentos básicos y duraderos, por lo que pudiera pasar. Sin embargo, cuando la situación se va calmando y empezamos a ver el final, cambian nuestros hábitos de consumo para ahora centrarse en un consumo más relajado, y caracterizado por los caprichos.
Por ello, es posible que en el futuro más inmediato y en el medio plazo, sigamos viendo en nuestros hábitos de consumo, comportamientos similares a los de la cuarentena, como pueden ser el hacer compras más grandes, cocinar más... Sin embargo pienso que, al igual que ha dicho mi compañero, los humanos tendemos a olvidar fácilmente las situaciones pasadas, por lo que tan pronto todo vuelva a la normalidad (ya sea con el hallazgo de una vacuna o el de un tratamiento efectivo contra el virus) la población ira regresando poco a poco al consumismo masivo que caracterizaba nuestras compras antes del covid-19.
Un saludo a todos, ¡Ánimo!
Buenas tardes.
ResponderEliminarEn primer lugar, darle las gracias a Marta por iniciar este debate.
Como hemos visto, la situación causada por el COVID-19 ha provocado que cambien totalmente nuestros hábitos normales de consumo. Se han aumentado los consumidores que realizan las compras online de productos de primera necesidad, sobre todo personas mayores, por ser las personas con más riesgo de contagio de tal virus. Así, las personas han aumentado explosivamente su consumo de dichos bienes, haciendo que empresas como Mercadona o Carrefour, aumenten muy considerablemente sus ventas, ampliando incluso la plantilla de trabajadores para abastecer las necesidades de los consumidores. De tal manera, son los supermercados los que más se han beneficiado de dicha situación.
Por otro lado, hay empresas que no han tenido tanta suerte, tales como aquellas dedicadas a la hostelería, aviación, sector automovilístico, sector textil, entre otros, puesto que no son sectores dedicados a la alimentación. Aunque se haya reducido el consumo en dichas empresas, éstas tendrán que reaccionar incentivando de nuevo a consumir los productos que ofrecen para intentar compensar esta crisis donde han perdido beneficios. Así, se encargarán ellas mismas de que, si por nosotros solos no volvemos a ese consumo excesivo que teníamos antes de la pandemia, lo hagamos porque nos incentiven a ello.
De tal manera, sí que hemos cambiado nuestros criterios respecto a nuestro nivel de consumo, pero será transitorio, puesto que en el momento en el que se descubra la vacuna y la economía se recupere, volviendo el nivel de empleo y ocupación, volveremos a consumir como hemos estado haciendo siempre.
Un saludo y ánimo a todos.
ResponderEliminarBuenas tardes a todos.
Lo primero es agradecer a mi compañera Marta por iniciar este debate, ya que creo que es de vital importancia en el mundo tan consumista en el que vivimos.
Antes del Covid-19, vivíamos en una sociedad consumista en la cual se producía una gran acumulación de bienes y servicios que son no esenciales. Este consumismo perjudicaba en gran manera a la naturaleza, ya que es dañino para el equilibrio ecológico, y ya que los recursos son finitos. Durante el confinamiento hemos visto que este consumismo se ha visto reducido, y los hábitos de consumo han pasado a ser principalmente de bienes de primera necesidad.
Creo que este cambio también se debe a que muchas familias se han visto afectadas en cuanto a sus empleos, y sus ingresos se han visto reducidos, por lo tanto, si tienes menos ingresos gastaras menos dinero en productos no esenciales como pueden ser los artículos de lujo y más en bienes de primera necesidad.
En respuesta a las preguntas planteadas, estoy de acuerdo con mis compañeros, en que este cambio en los hábitos de consumo solamente va a durar a corto-medio plazo y que cuando la economía se recupere, creo que volveremos al consumismo que existía antes de la pandemia, ya que desde mi punto de vista las empresas volverán a hacer campañas masivas incentivando las compras.
Aunque creo que todos deberíamos de luchar para no volver a esos hábitos de consumo, más que nada porque es perjudicial e incentiva la contaminación global y el cambio climático y es algo que se debería de parar ahora que estamos a tiempo. Esperemos que esta situación nos haya servido para recapacitar y no volvamos a cometer los mismos errores, aunque no creo que suceda.
Un saludo y ánimo.
Buenas tardes.
ResponderEliminarMuchas gracias Marta por esta nueva propuesta debate y por tu aportación.
En primer lugar, creo que resulta más que evidente que la gran mayoría de familias españolas se han visto perjudicadas económicamente, y se verán, por esta crisis, especialmente las clases madias y bajas. El aumento del desempleo, el cual se prevé que será del 19% y no se recuperará hasta 2021, va a ser sin duda un factor clave respecto a los niveles de consumo de los individuos.
Desde el comienzo del estado de alarma, muchas personas se han visto obligadas a parar su actividad, teniendo que seguir atendiendo una serie de costes y gastos y recibiendo escasos o nulos ingresos. Por tanto, estas familias, que llevan meses con el agua hasta el cuello y comprando sólo lo estrictamente necesario para seguir adelante con el día a día, dudo mucho que vuelvan a sus patrones de consumo "normales” anteriores al inicio de la crisis sanitaria. El hecho de que se vaya reiniciando la actividad económica poco a poco, no significa que estas familias vuelvan a recuperar el nivel económico que poseían previamente, sino que salir de esta situación va a ser un proceso lento y complicado.
Por otro lado, pienso que esta situación está provocando un cambio en la mentalidad de muchas personas en cuanto a los anteriores patrones de consumo excesivo. El estar confinados, sin poder trabajar y con muchos menos ingresos que antes, y la escasez de determinados recursos, nos está obligando a darnos cuenta de que podemos vivir simplemente con una serie de recursos esenciales y adaptarnos a una nueva situación. Además, creo que la gran mayoría de todos nosotros estamos aprendiendo a valorar más lo que tenemos y lo que nos podemos permitir.
Por último, también me gustaría mencionar que, a pesar del cambio en las sendas de consumo que vamos a observar con total seguridad, también habrá sectores de la población que mantengan el mismo o un nivel similar de consumo, tanto de productos básicos como de lujo y no esenciales, bien porque se lo puedan permitir o porque no se hayan visto tan perjudicados como otros sectores. Además, aunque es totalmente cierto que el consumo de productos como ropa, accesorios, aparatos electrónicos, etc., se ha visto bastante reducido, los pedidos online han sido un factor clave para el mantenimiento de muchas marcas y empresas, puesto que gran parte de la población ha recurrido a esta opción.
Respecto a las futuras campañas publicitarias de las empresas, creo que resulta evidente que tratarán de llegar al mayor número de individuos tratando de incentivar el consumo lo más que puedan, con el objeto de retomar sus niveles de ventas e ingresos y poder compensar las pérdidas sufridas durante el estado de alarma. A las empresas no les preocupa la situación económica en la que se encuentren los individuos, sino obtener beneficios y salir lo mejor parados posible. Eso sí, estas campañas no serán como siempre, sino que estarán orientadas en cierto modo a la nueva situación a la que nos enfrentaremos.
En conclusión, creo que, en general, los patrones de consumo tras el confinamiento van a sufrir un cambio importante por motivos como los que he expuesto anteriormente. Puede que con el tiempo y el proceso de recuperación económica tras la crisis, se vuelvan a alcanzar niveles similares a los anteriores, aunque no cabe duda que será un proceso extremadamente lento y complejo, a lo que hay que sumar el cambio en la mentalidad que se está generando en gran parte de la población.
Un saludo y mucho ánimo a todos!
ResponderEliminarBuenos días, en primer lugar me gustaría agradecer a mi compañera Marta por sacar a la luz este debate.
Es observable como nuestros patrones de consumo durante esta crisis han cambiado;
Las redes IP han registrado incremento de las ventas online de más del 55%.
Productos relacionados con la práctica deportiva -que en términos globales han crecido casi un 200%.
La venta de juegos de mesa (más de un 30%), videojuegos (142%), las suscripciones a servicios de streaming (con aumentos de hasta el 79%), los productos farmacéuticos (30%), y el mobiliario (130%).
Las plataformas y apps de venta de entradas y espectáculos sufrieron una caída del 55%.
Estos son muchos de los cambios que se han producido a raíz de esta crisis, yo creo que esto es un punto crítico para la economía, y como todos los puntos críticos marcarán un antes y un después en la sociedad, no sólo en lo económico sino también quizás en lo que se está hablando sobre los patrones de consumo.
Creo que se producirá un cambio en los patrones de consumo, no tan drástico como el hasta ahora, pero si se producirá un incremento de las tecnologías en todos los ámbitos, sobre todo en el de servicios, en los cuales podríamos decir que se va a producir una digilitación acelerada. En el caso de los países desarrollados, somos una sociedad muy cómoda que valoramos mucho el tiempo libre, y se ha puesto sobre la mesa algo que ya llevaba hablándose tiempo como el teletrabajo, la comida a domicilio...etc... Así pues creo, que este punto crítico va a conseguir que aquellos países, aquellas empresas que sepan incorporar la tecnología rápidamente y el comercio online saldrán muy bien parados del periodo post crisis.
Por lo tanto, ante la pregunta de si van a cambiar los patrones de consumo, yo diría que sí, no de una manera tan drástica pero sí que hará que las empresas se tecnifiquen y veamos cómo es posible entre otras el teletrabajo o el incremento acelerado de las compras online.
¡Buenas tardes a todos!
ResponderEliminarEn primer lugar, gracias Marta por iniciar este debate puesto que me parece un tema muy interesante y que, sin duda, es importante que reflexionemos acerca del mundo consumista en el que vivimos y que, por desgracia, lo único que vamos a conseguir con este comportamiento sea destruir nuestra querida Tierra.
Con respecto a las preguntas planteadas por mi compañera pienso que, es cierto que hemos disminuido nuestro nivel de consumo debido a diversos factores como, por ejemplo, el simple hecho de no salir a la calle hace que no necesitemos toda la ropa, maquillaje, complementos... que tenemos y, por tanto, tampoco necesitemos comprar más.
Aún así, pienso que cuando toda esta crisis del Covid-19 pase y volvamos a retomar nuestra vida habitual, seguiremos siendo igual de consumistas que antes puesto que vivimos en una sociedad creada para consumir. Nos llenan las televisiones, redes sociales, revistas, etc. de anuncios, los cuales, queramos o no, nos incitan a consumir, incluso cuando no lo necesitamos.
A pesar de todo esto, y hablando desde mi punto de vista y lo que tengo pensado realizar, tras ver un vídeo en relación a este tema, me he dado cuenta de que todo lo que necesitamos ya lo tenemos, afortunadamente, y lo que realmente hemos echado en falta estas semanas no han sido cosas, sino personas. Por tanto, he reflexionado acerca del tema y a partir de ahora voy a intentar comprar lo imprescindible y no consumir por consumir puesto que lo único que vamos a conseguir es dejar un mundo peor a nuestros hijos, nietos...
Debemos ser conscientes de que la Tierra no es capaz de aguantar el ritmo que los seres humanos le estamos imponiendo al emitir tanto CO2, residuos contaminantes... y que, al final, el único resultado que vamos a obtener será que se derritan los polos (cosa que ya es un hecho) y que acabemos extinguiendo toda forma de vida que tantos miles de millones de años han costado crear.
Aún así, todos somos libres de opinar de diversas formas y seguir consumiendo al mismo ritmo que antes, pero es cierto que ojalá la gente tras esta situación extrema que estamos viviendo se de cuenta que no necesitamos tanto para vivir bien y que lo que realmente necesitamos al final del día es a la gente que queremos.
Espero que todos estéis bien, un saludo y ánimo.
Buenas tardes,
ResponderEliminarEn primer lugar, agradecer a Marta este debate tan interesante y al resto de compañeros que están interviniendo.
Me gustaría centrar mi intervención analizando el impacto en el sector turístico, puesto que representando en la actualidad aproximadamente un 30% del PIB español de manera directa e indirecta, necesita una mención especial. Creo que en el corto plazo la llegada de turistas internacionales será muy reducida unido a que el turismo nacional, a pesar de las campañas existentes a favor del mismo, también descenderá considerablemente. Así, se estima una caída del 60,7% sobre el total de la actividad turística, siendo Andalucía la segunda Comunidad Autónoma más afectada. El miedo, la seguridad, la incertidumbre, las menores rentas, el aumento del ahorro, el encarecimiento del transporte... van a conllevar que aunque en muchos casos estemos deseando viajar, no lo haremos.
En definitiva, para evitar un desplome aun mayor del sector y lo que puede suponer en un país tan dependiente del mismo como el nuestro, es necesario llevar a cabo medidas y facilidades para favorecer al resurgir del sector. Por ejemplo, en Alemania en los últimos días ,se ha descendido el IVA en la hostelería del 19% al 7%.
No olvidemos que hay millones de puestos de trabajos en el sector que corren el riesgo de perderse, ya que alrededor del 80% del sector turístico está compuesto por pequeñas y medianas empresas. Sin ninguna duda es el sector más preocupante. Por ejemplo, cuando empiecen a abrir las tiendas, volverán a vender y lentamente se irán recuperando, pero un hotel, por ejemplo, aunque les permita abrir, sin turistas no hay ingresos. No es el momento de reducir el peso del turismo sino el de coordinar un plan específico para su recuperación. A nivel europeo, sería bastante beneficioso para el conjunto desarrollar medidas de seguridad homogéneas y compartidas por los Estados miembros. ¿Qué pensáis vosotros?
Un saludo a todos y espero que estéis bien.
Buenas tardes! Muchas gracias Marta por crear un debate acerca de lo que a muchos, o por lo menos a mí, nos da que pensar.
ResponderEliminarA lo largo de la historia han ocurrido muchos acontecimientos de gran impacto económico y social como está siendo el COVID-19 y, aún así, los seres humanos no hemos aprendido a valorar lo realmente importante, incluso hemos ido desarrollando una sociedad cada vez más consumista intentando saciar nuestras superfluas necesidades.
Al igual que ha dicho Ana Marina, pienso que este ha sido un parón totalmente imprescindible para el medioambiente, donde han erupcionado volcanes, desaparecido la contaminación de grandes ciudades como Madrid por ejemplo e incluso hemos vuelto a sentir el clima que corresponde a esta época del año, con constantes lluvias y temperaturas más bajas de las que solemos tener.
Cuando esta situación se controle, todos volveremos a la normalidad poco a poco y querremos recuperar aquello de lo que se nos privó durante meses, pero debemos centrarnos en lo que realmente hemos echado en falta e intentar comprar productos esenciales.
Esto debe hacernos pensar que tenemos mucho más de lo que necesitamos, aunque siempre ansiábamos más.
No obstante, pienso que cuando volvamos a vivir como lo solíamos hacer, también volverán los malos hábitos (de hecho, con las salidas de hoy, se ha visto basura por el suelo) y, por supuesto, las grandes empresas querrán recuperar todos los ingresos que se han visto reducidos estos meses.
Entonces sí, creo que volverán las compras masivas, la contaminación y la falta de empatía respecto a nuestro entorno, pero no por ello nosotros debemos ser partícipes.
Un saludo!
Buenas tardes,
ResponderEliminarMuchas gracias Marta por iniciar este debate tan interesante.
En primer lugar, con esta situación sin precedentes, nuestros hábitos a la hora de comprar ropa al menos en el corto y medio plazo van a ser muy distintos.
La manera de comprar en tienda física cuando termine el confinamiento será muy diferente a como solíamos hacerlo hasta hace tan solo un mes y medio. Las tiendas no van a poder estar muy concurridas y si alguien quiere probarse una prenda, esta deberá estar luego en cuarentena al menos un par de días para prevenir el contagio con otros clientes o con los empleados. También pueden obligar a usar materiales de protección adecuados como mascarillas y guantes y lavarse las manos con gel desinfectante para acceder a ellas.
Las empresas de la industria textil necesitarán reinventarse e incentivar más la compra online para atraer así a más clientes evitando el continuo contacto físico que se produce en los establecimientos. El problema de ello es que esa iniciativa podrán llevarlo a cabo a nivel nacional las grandes marcas puesto que son las que tienen mayor capacidad para ello, sin embargo, un pequeño comercio de barrio tendrá grandes limitaciones.
Por lo tanto, los mayores perjudicados de esta crisis pueden ser los pequeños comerciantes al verse obligados a echar el cierre a causa de la imposibilidad de poder llevar a cabo dichas medidas o al no aguantar esa bajada tan brusca de ventas.